De derecha a izquierda: Gerson Andrés Florez acompañado por la Lic. Paty Espinosa, el Ing. José Luis Miranda y el Ing. arturo CamposNota tomada de BBC Mundo
Gerson Andrés, una joven voz por la paz
Tiene sólo 16 años, pero dos nominaciones consecutivas para el Premio Nobel de la Paz.
Nacido en Bogotá, Colombia, en 1985, Gerson Andrés Flórez Pérez está marcado como millones de niños y jóvenes de su país por lo que él califica como "una guerra sin fin y absurda, legada por varias generaciones y por más de cincuenta años".
En 1997, su ensayo "Niños por la paz" marcó no sólo su futuro como símbolo de los movimientos defensores de derechos humanos, sino también lo que con el tiempo terminó convirtiéndose en el "Movimiento de Niños y Niñas por la Paz".
Gerson acaba de pasar por Londres, invitado a disertar sobre la situación de su país y en especial sobre las minas antipersonales en la London School of Economics.
Violencia
El joven se ha convertido en la voz de los niños colombianos.
Su juventud no es impedimento para mostrar tanto en su conferencia como en su diálogo con la BBC, su profundo conocimiento de las consecuencias de la violencia en Colombia, en especial para los niños.
"La misma intensificación del conflicto armado -explica- ha hecho que se utilicen y evolucionen diferentes estrategias en contra del enemigo".
Pero quizás más preocupante que las armas convencionales o de fabricación casera (como las bombas armadas con cilindros de gas) son las miles de minas antipersonales, colocadas en terrenos no señalizados.
"Esto hace más vulnerable a la sociedad civil, especialmente a los niños", dice Gerson, para seguidamente añadir:
"Se calculaba que hasta 1998 había más de 70 mil minas en el país. La intensificación del conflicto significó que ese número creciera. Esos artefactos se encuentran en unos 140 municipios, o sea un 13% del territorio del país, especialmente en la costa norte y en la frontera con Venezuela".
Los niños
Gerson Andrés Flórez Pérez no duda al afirmar que los más afectados por el conflicto colombiano con los niños del país.
Unos 42 niños murieron en el último ataque en Bojayá
"De los 40 millones de colombianos, 17 millones son niños; o sea que los menores de 18 años representamos, el 42%. Casi 3 millones viven directa e intensamente los estragos de la guerra", informa.
Más allá de los datos que describen la realidad del país, el joven se ha convertido en un vocero internacional de una propuesta de paz que ya ha presentado en diferentes escenarios.
Su iniciativa contempla una presión constante por parte de la comunidad internacional a los actores del conflicto armado para que excluyan a la población civil.
En su disertación en la London School of Economics insiste en que es necesario que los actores del conflicto puedan por lo menos comprometerse a pautas mínimas de confrontación, "como por ejemplo normas que establezcan que el uso armas siempre deba hacerse con un blanco directo".
Por último, el joven colombiano hace un llamado a los niños y jóvenes del mundo para que reclamen a sus respectivos gobiernos una mayor participación y compromiso en la búsqueda por la paz.
Tiene sólo 16 años, pero dos nominaciones consecutivas para el Premio Nobel de la Paz.
Nacido en Bogotá, Colombia, en 1985, Gerson Andrés Flórez Pérez está marcado como millones de niños y jóvenes de su país por lo que él califica como "una guerra sin fin y absurda, legada por varias generaciones y por más de cincuenta años".
En 1997, su ensayo "Niños por la paz" marcó no sólo su futuro como símbolo de los movimientos defensores de derechos humanos, sino también lo que con el tiempo terminó convirtiéndose en el "Movimiento de Niños y Niñas por la Paz".
Gerson acaba de pasar por Londres, invitado a disertar sobre la situación de su país y en especial sobre las minas antipersonales en la London School of Economics.
Violencia
El joven se ha convertido en la voz de los niños colombianos.
Su juventud no es impedimento para mostrar tanto en su conferencia como en su diálogo con la BBC, su profundo conocimiento de las consecuencias de la violencia en Colombia, en especial para los niños.
"La misma intensificación del conflicto armado -explica- ha hecho que se utilicen y evolucionen diferentes estrategias en contra del enemigo".
Pero quizás más preocupante que las armas convencionales o de fabricación casera (como las bombas armadas con cilindros de gas) son las miles de minas antipersonales, colocadas en terrenos no señalizados.
"Esto hace más vulnerable a la sociedad civil, especialmente a los niños", dice Gerson, para seguidamente añadir:
"Se calculaba que hasta 1998 había más de 70 mil minas en el país. La intensificación del conflicto significó que ese número creciera. Esos artefactos se encuentran en unos 140 municipios, o sea un 13% del territorio del país, especialmente en la costa norte y en la frontera con Venezuela".
Los niños
Gerson Andrés Flórez Pérez no duda al afirmar que los más afectados por el conflicto colombiano con los niños del país.
Unos 42 niños murieron en el último ataque en Bojayá
"De los 40 millones de colombianos, 17 millones son niños; o sea que los menores de 18 años representamos, el 42%. Casi 3 millones viven directa e intensamente los estragos de la guerra", informa.
Más allá de los datos que describen la realidad del país, el joven se ha convertido en un vocero internacional de una propuesta de paz que ya ha presentado en diferentes escenarios.
Su iniciativa contempla una presión constante por parte de la comunidad internacional a los actores del conflicto armado para que excluyan a la población civil.
En su disertación en la London School of Economics insiste en que es necesario que los actores del conflicto puedan por lo menos comprometerse a pautas mínimas de confrontación, "como por ejemplo normas que establezcan que el uso armas siempre deba hacerse con un blanco directo".
Por último, el joven colombiano hace un llamado a los niños y jóvenes del mundo para que reclamen a sus respectivos gobiernos una mayor participación y compromiso en la búsqueda por la paz.
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